La actividad de la hidroeléctrica Mexhidro ha provocado la muerte de al menos 100 toneladas de mojarras tilapia en la presa El Gallo, ubicada en el municipio de Cutzamala de Pinzón, en la región de Tierra Caliente del estado. Los pescadores locales denunciaron que la falta de oxigenación en el agua, derivada de la negativa de la planta a abrir las compuertas para el flujo necesario del líquido, ha causado esta devastadora pérdida.

Según reporta el diario La Jornada, la tragedia comenzó hace cuatro días y ha afectado a ocho cooperativas y a pescadores particulares que dependen de esta fuente de ingreso. «Es una tristeza que ni el gobierno del estado ni el federal nos volteen a ver. ¿Quién sabe qué es lo que quieren que hagamos?», reprocharon los afectados, quienes exigen soluciones inmediatas.
La Comisión Reguladora de Energía otorgó en 1999 el permiso de autoabastecimiento de energía eléctrica a Mexicana de Hidroelectricidad Mexhidro, SA de CV. Desde la construcción de la planta en 2007, cada año se registran conflictos con los pescadores debido a la retención del flujo del agua. Los habitantes explicaron que la negativa de Mexhidro a abrir las compuertas para el desazolve del vaso de la presa ha generado desastres similares desde 2013.
La presa El Gallo abarca más de 30 kilómetros de longitud en el río Cutzamala y es un pilar económico para varias comunidades. Entre las poblaciones afectadas destacan La Cañada, Arroyo Seco, La Joya, La Laja, La Playa, El Tinbal, El Pinzán, Ojo de Agua y El Salitre, en Cutzamala de Pinzón, además de Tiquicheo, en Michoacán.
La situación es insostenible para los pescadores, quienes en el pasado lograban producir hasta 30 mil toneladas anuales de peces, aunque esta cifra se ha reducido a 20 mil toneladas hasta julio del año pasado. La mayoría de la producción estaba destinada al mercado de La Viga, en la Ciudad de México.
Los inconformes destacaron que, pese a sus esfuerzos por implementar sistemas de bombeo y otras medidas, la falta de apoyo gubernamental y la aparente indiferencia de Mexhidro los han dejado en una situación crítica. «Hemos tomado las medidas necesarias, las precauciones, y ni así podemos dar batalla», afirmaron.
Mexhidro, que genera ganancias de hasta un millón de dólares diarios al abastecer energía eléctrica a la Ciudad de México y estados vecinos, ha sido señalada como responsable directa de esta crisis ambiental y económica. Los pescadores aseguran que la planta prioriza sus intereses económicos sobre el bienestar de las comunidades y el medio ambiente.
Ante esta problemática, los pescadores hicieron un llamado a la intervención de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y representantes de los tres niveles de gobierno. De no obtener una respuesta pronta, han advertido que organizarán protestas para exigir soluciones.
«Las autoridades nunca nos han querido ayudar con nada. Es momento de que volteen a vernos antes de que esta situación nos deje sin sustento y con un desastre ecológico irreversible», concluyeron.