Proporcionarán agua potable a comunidades más alejadas del municipio de Nocupétaro

Con una inversión de 5 millones 300 mil pesos y una longitud de 24.5 kilómetros, comenzó la construcción del sistema de agua potable para la comunidad de El Rancho, una de las más relajadas y olvidadas del municipio de Nocupétaro, el cual suministrará 2 litros por segundo de agua, beneficiando a más de 6 localidades.

Desde el manantial lejano de casi 25 kilómetros, será llevado el vital líquido a comunidades alejadas de la cabecera municipal, según lo constató el presidente municipal de Nocupétaro, Francisco Villa Guerrero, para beneficio de sus habitantes.
Desde el manantial lejano de casi 25 kilómetros, será llevado el vital líquido a comunidades alejadas de la cabecera municipal, según lo constató el presidente municipal de Nocupétaro, Francisco Villa Guerrero, para beneficio de sus habitantes.

El presidente municipal, Francisco Villa Guerrero, acudió el pasado viernes acompañado de César Salomé Villaseñor, director de Obras Públicas; Arturo Villar, titular de Desarrollo Social; y Rosario González, Oficial Mayor, para dar el banderazo de inicio a esta importante obra.

Con esta acción se pretende cumplir con las necesidades más prioritarias de las comunidades que se han quedado marginadas por años y que carecen de los servicios indispensables para llevar una vida digna de todo ser humano, para ello Francisco Villa, se trasladó a los límites de Nocupétaro con el municipio de Villa Madero, en las cercanías de la sierra con dos horas de camino a pie llegando a la comunidad llamada El Rancho donde se encuentra un manantial.

Ahí comenzarán los trabajos de un sistema de agua potable por gravedad con una longitud de 24.5 kilómetros, el cual suministrara 2 litros por segundo de agua y tendrá un costo total de 5 millones 300 mil pesos, misma que en la primera etapa tendrá el costo de 825 mil pesos, esta obra fue convenida con la Secretaría de Desarrollo Social y el gobierno municipal.

Esta obra beneficiará a las comunidades de La Angostura, Las Calabazas, Agua Santa, La Mesa, El Copalito, Las Cuevitas, entre otras comunidades que en tiempo de estiaje carecen del vital líquido, teniendo que traer el agua del río en tambos para uso doméstico y para su ganado.

Hoy se vislumbra una esperanza para los habitantes de esas comunidades que sus antepasados no pudieron ver, esto es sólo una de las muchas obras que Francisco Villa Guerrero, ha realizado, siempre preocupado y comprometido con la gente.

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