Múgica, Mich.- El Gobernador del Estado, Leonel Godoy Rangel, acompañado del presidente municipal de Múgica, Armando Medina Torres y el director general de la Comisión para el Desarrollo Económico y Social de la Tierra Caliente del Estado de Michoacán, Gabriel Mendoza Jiménez, realizó un recorrido de supervisión de los trabajos de construcción de la Presa General Francisco J. Múgica.
La obra en la actualidad presenta un avance del 40 por ciento y se espera entre en operación a finales del 2010; tendrá una inversión de mil 500 millones de pesos, que serán ejercidos por el gobierno del Estado.
Durante el recorrido el mandatario estatal constató los trabajos que se han venido desarrollando en la construcción de la presa de almacenamiento, ubicada en las inmediaciones de Nueva Italia, en la región de Tierra Caliente y que tiene como finalidad solucionar de manera definitiva la escasez de agua, garantizando el suministro a más de 12 mil hectáreas de los municipios de Múgica, La Huacana y Parácuaro de manera directa.
Godoy Rangel mencionó que el gobierno tiene el compromiso de terminar la construcción de la presa, para ello durante el 2009 se destinarán 500 millones de pesos, que ayudarán para llegar al 70 por ciento de la obra y para el 2010 poner lo necesario para que se concluya, ya que será de gran ayuda al campo de una región tan fértil como es la Tierra Caliente del Valle de Apatzingán.
Señaló que la obra tiene un contenido de justicia social al ser una zona pobre, por lo que fue una gran decisión del gobierno de Lázaro Cárdenas Batel, en su momento, y ahora del gobierno que la ha tomado como una causa suya, porque brindará apoyo a miles de campesinos en la zona.
El proyecto contempla la construcción de la presa con 90 metros de profundidad y un canal de conducción de 35 kilómetros de longitud para distribución de agua. La construcción de la obra se inició en marzo del 2008 y a la fecha presenta un avance del 40 por ciento, se tiene prevista su terminación y puesta en marcha para suministrar el riego a partir del ciclo otoño-invierno del año 2010.
Los ingenieros responsables de la obra explicaron al jefe del ejecutivo estatal, que una de las acciones realizadas fue la desviación del río El Marqués, que representa la fuente de alimentación de la presa General Francisco J. Múgica, canalizándolo hacia un túnel de 405 metros de longitud y ocho metros de diámetro, lo que permitió dejar aislado y seco el tramo de cauce sobre el que se desplanta la cortina, siendo esta la primera vez que el río deja de correr libremente por su cauce original, obra que era necesaria para continuar con los trabajos de la presa.
Gabriel Mendoza Jiménez explicó que cuando el proyecto esté concluido se beneficiarán cultivos de frutales y cítricos que abarcan el 89 por ciento de la zona, y se tiene un valor anual de producción agrícola estimada de 817 millones de pesos, además de alcanzar un aumento del 77.6 por ciento en la producción.
También se dio a conocer que con la construcción de la presa se beneficiará a 2 mil 370 ejidatarios, además de generar 3 mil 263 empleos directos, 4 mil 47 empleos conservados, 9 mil 790 empleos indirectos para un total de 17 mil 100.
En lo que se refiere a la construcción del túnel de desvío se requirió de una excavación de 75 mil 500 metros cúbicos de roca, colado de 4 mil 500 metros cúbicos de concreto, la colocación de 97 marcos metálicos de refuerzo y 2 mil 500 anclas de estabilización, además de la perforación de 2 mil drenes de alivio para disminuir la presión del agua.
Se han realizado excavaciones de más de 510 mil metros cúbicos, para alojar la cortina de la presa que está proyectada construirse combinando un tramo rígido de concreto compacto con rodillo y un tramo en la margen derecha, que será construido de materiales graduados, con un núcleo de arcilla impermeable y respaldos de enrocamiento.
Mendoza Jiménez detalló que dentro de los trabajos que se han venido realizando se han establecido convenios de colaboración con la UNAM y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) con el fin de salvaguardar la flora endémica de la zona en peligro de extinción, además de realizar trabajos de salvaguarda arqueológica de los posibles restos prehispánicos pertenecientes a la cultura Terracalenteña de los siglos XV y XVI que se pudieran encontrar.
[ad#728×90-2]
