Leche rosa
Juan Miranda Alvarado.
Hoy me mandaron por la leche al establo de don Melquiades Romero, no me gusta ir a este lugar, porque el señor siempre me pellizca los cachetes y hoy me los pellizcó más fuerte, me dieron ganas de mentársela, pero está grandote el viejo y mejor nomás se la menté quedito… el señor me dio la leche y cuando la vio mi mamá; que se asombra al ver la leche de color rosa “escuincle qué le hiciste a la leche que está de color rosa” y que me empieza a varear en las nalgas y que le digo que así me la habían dado y me lleva de la oreja con don Melquiades “no se enoje doña Tere, lo que pasa es que mis vacas las alimenté con betabel y la leche les salió rosa” mi mamá como que entró en razón, pero ya la madriza me la había dado y ni el tomar leche rosa me quitaba el dolor de las nalgas y las orejas.
