El pasado 17 de junio se cumplió un año del incendio en la subestación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Huetamo, que dejó a más de 60 mil personas sin suministro eléctrico en la ciudad y en municipios de los Estados de Michoacán y Guerrero, situación que sigue siendo crítica y las fallas constantes en el servicio eléctrico continúan afectando gravemente a la comunidad.
A pesar de las repetidas denuncias realizadas tanto a través del número de emergencia 071 supuestamente disponible las 24 horas del día, además en medios de comunicación locales y regionales, la paraestatal no ha proporcionado una solución definitiva a este problema.
La situación se ha vuelto insostenible, causando innumerables problemas y pérdidas en todos los sectores sociales y económicos. Los residentes y empresarios de Huetamo y los municipios aledaños han tenido que enfrentar cortes de energía frecuentes y las constantes variaciones del voltaje, lo que ha resultado en la pérdida de productos perecederos, daños a electrodomésticos, interrupción de actividades comerciales y educativas, y una creciente frustración entre la población.
Las promesas de solución por parte de la CFE han sido insuficientes y la comunidad sigue esperando respuestas y acciones concretas que pongan fin a este problema. La falta de electricidad no solo afecta la calidad de vida de los habitantes, sino que también pone en riesgo la seguridad y el desarrollo de la región.
Ante esta grave situación, hacemos un llamado urgente a la sociedad civil de Huetamo y los municipios cercanos para que se unan y levanten la voz de manera organizada. Es crucial que nuestras quejas sean escuchadas por las autoridades federales para que tomen las medidas necesarias y resuelvan de una vez por todos estos problemas.
La unidad y la acción colectiva son nuestras mejores herramientas para exigir el respeto a nuestros derechos y la mejora en el suministro eléctrico que se paga y se paga a un alto costo, como si estuviéramos en una zona con promedio mínimo de 30 grados centígrados en verano.
Nuestra región el promedio mínimo en verano es 38 grados centígrados (Huetamo como punto de referencia) y máximas de 43 a 47 grados centígrados. Lo que provoca un alto consumo de energía eléctrica y por ende un cobro más alto al sobrepasar las medidas de la tarifa C, por los aparatos eléctricos como refrigeradores, ventiladores y aires acondicionados que trabajan más tiempo; y que los subsidios sean retirados y se tenga que pagar más.
Sin olvidar que ante la alta demanda de energía eléctrica por los usuarios genera que las subestaciones de la región, en especial la de Huetamo no den abasto y provocando constantes cortes de energía eléctrica por la quema de transformadores, cortes de cuchillas y variaciones de voltaje.
No podemos permitir que esta situación continúe. Es momento de actuar juntos, de exigir una respuesta efectiva y de garantizar que nunca más tengamos que enfrentar las consecuencias de un sistema eléctrico ineficiente. La voz de una comunidad unida puede lograr el cambio necesario para el bienestar y el desarrollo de todos.