El atentado criminal en “El Tule” fue por “encargo”, al asesino lo contrataron en Tijuana por 20 mil pesos para ejecutar al hoy occiso, sin embargo cuando pretendía huir, fue capturado. Después de los violentos hechos de sangre reportados la noche del domingo pasado en el Arroyo “El Tule”, donde un sujeto armado disparó contra un par de personas, muriendo una de éstas por los impactos recibidos, logrando el sobreviviente llegar hasta la comandancia de Seguridad Pública del puerto de Cabo San Lucas, para pedir ayuda; el intenso operativo de los cuerpos policiales rindió fruto, ya que se logró la captura del sicario y se investiga la identidad y paradero de los autores intelectuales.
El detenido como presunto responsable del atentado criminal se identificó como Leny Daniel Sánchez Becerra, de 27 años de edad, originario de Carácuaro, Michoacán, pero radicado en la ciudad de Tijuana, B.C., la detención ocurrió cuando éste ya viajaba a bordo de un camión de pasajeros rumbo a Tijuana. Sánchez Becerra habría confesado a la PGJE que un par de personas le habían hecho un “encarguito” y por el cual le iban a pagar la cantidad de 20 mil pesos, siendo contratado en la ciudad de Tijuana.
Los contratistas lo trajeron a Los Cabos y lo instalaron en el hotel Oasis, donde le dejaron una pistola debajo de la almohada. Las personas que lo contrataron fueron también las que lo llevaron el domingo al Arroyo “El Tule”, para que hiciera el trabajo. Le dijeron que iba a llegar una persona de estatura alta y de complexión un tanto robusta y que esa persona sería la que tenía que matar.
Más tarde, cuando ubicó a la víctima que viajaba con otra persona más, él les pide “raite” para que lo dejen en la carretera, pero al bajarse del automóvil saca el arma y dispara en repetidas ocasiones en contra de su víctima, hiriendo además al conductor, mismo que logra huir. El sicario se interna en el monte y se deshace del arma utilizada, luego llama a las personas que lo contrataron para que pasen por él, ocurriendo esto instantes después en la camioneta de color oscuro para posteriormente llevarlo de nueva cuenta al hotel donde permaneció hasta abordar el autobús.
Los agentes de la Policía Ministerial del Estado lograron recuperar el arma homicida, siendo calibre 9 milímetros, marca Llama, de fabricación española. Sobre el móvil del crimen, trascendió que al parecer el hoy occiso habría tenido un problema muy grave en Guerrero, de donde huyó para refugiarse en Cabo San Lucas, pero al parecer fue identificado por sus rivales y éstos contrataron al sicario para ejecutarlo. Las investigaciones continúan para dar con el paradero de los autores intelectuales del homicidio y lesiones dolosas del joven sobreviviente.
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