- El pasado domingo la actriz hubiera celebrado su cumpleaños número 64.
La actriz huetamense Fanny Cano, considerada la primera “símbolo sexual” del cine nacional y recordada por intervenir en telenovelas como “Rubí” y “Yesenia”, este domingo hubiera celebrado su cumpleaños número 64 vigente en la pantalla chica, gracias a su filmografía.
Su nombre está escrito con letras de oro en la historia del Séptimo Arte y la televisión mexicana, ámbito en el que participó también en “La Mentira”, al lado de Enrique Lizalde, y de la cual se realizará una adaptación este año.
Cano, quien trabajó en más de 30 películas como “Entrega inmediata”, “Dile que la quiero” y “Escuela para solteras”, algunas de las cuales se transmiten en un canal de televisión de paga, fue homenajeada en el marco del pasado Festival Internacional de Cine de Morelia.
En este encuentro, la actriz Julissa, su compañera en “La Mentira”, consideró que la michoacana fue la artista más bella y sexy de su generación, por encima de Maricruz Olivier, Patricia Conde, Alicia Bonet y Jacqueline Andere, entre otras.
María Cano Damián, cuya trayectoria fue recién reseñada en el programa “La historia detrás del mito”, transmitido hace unas semanas, nació el 28 de febrero de 1944 en Huetamo, Michoacán. Fue hija de Francisco Cano Romero y Aurelia Damián, y hermana de Evelia Rosa, Francisco y Sergio.
Durante su juventud se trasladó a la Ciudad de México, y a los 16 años fue electa reina de la Preparatoria 2, después princesa de la porra de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y finalmente reina de la misma institución.
Hizo su debut como actriz de cine con el largometraje “El cielo y la tierra”, junto a Angélica María en 1962, posteriormente obtuvo su primer estelar como pareja romántica de Mario Moreno “Cantinflas”, en la película “Entrega inmediata”, en 1963.
En la película “Los reyes del volante”, dirigida por Miguel Morayta, Fanny tuvo su primer protagónico, al hacer el papel de la hija de los comediantes mexicanos Viruta y Capulina.
Alcanzó el verdadero reconocimiento en la televisión, a través del melodrama “La mentira” (1965). Se consolidó como primera actriz y artista de moda en esa época en las telenovelas “Rubí” (1968), “Yesenia” (1971) y “Muñeca” (1974). Incursionó como productora de largometrajes con “Una mujer honesta” (1969), “Las cautivas” (1971) y “Victoria” (1972), aunque en el mundo del espectáculo se le conoce mejor por sus actuaciones como vedette en películas como “Buenas noches, año nuevo”, junto a Silvia Pinal y Ricardo Montalbán, bajo la dirección de Julián Soler.
Su trayectoria incluyó actuaciones en largometrajes como “Zona roja” (1976), “La leyenda de Rodrigo” (1977) y “La Güera Rodríguez” (1977), así como en las telenovelas “María José” (1978), “Espejismo” (1981) y “Una leyenda de amor” (1982), última presentación en la televisión de esta actriz.
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