El Senador Cristóbal Arias Solís aseguró que el dinero destinado a fines como la cultura, la ciencia, el deporte y la atención a los desastres naturales seguirá disponible y se entregará de manera directa y personal a los beneficiarios.
“El Senado aprobó esta madrugada extinguir 109 fideicomisos para evitar que se sigan manejando dineros públicos sin rendir cuentas. Había opacidades y de lo que se trata es de transparentar el manejo de esos recursos”, expresó.
Entrevistado en la sede alterna de la Cámara Alta, la casona de Xicoténcatl, el Presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales dijo que lo sustancial al extinguir esos fideicomisos es manejar con rectitud esos recursos que provienen de los contribuyentes y que en muchos casos se habían convertido en negocios de particulares.
El Senador michoacano dijo que debe de haber la confianza de las personas inconformes que consideren que se pueden afectar los apoyos que venían recibiendo, “no va a ser así, con la extinción de estos fideicomisos, serán ahora las dependencias oficiales del gobierno federal las que se los proporcionen”.
Arias Solís recalcó que el órgano fiscalizador de la aplicación de los dineros públicos, la Auditoría Superior de la Federación, reconoció la imposibilidad de poder supervisar la aplicación de los recursos que se manejaban en esos 109 fideicomisos. “Es muy seria la responsabilidad que el grupo parlamentario de Morena está asumiendo al aprobar la extinción de estos fideicomisos si no pensáramos que se deben salvar los apoyos a deportistas de alto rendimiento, científicos, artistas, etcétera”, añadió.
El Vicecoordinador de la fracción parlamentaria de Morena en el Senado dijo que, al aprobar la extinción de esos 109 fideicomisos, se está respaldando un compromiso del gobierno encabezado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien se comprometió a la lucha contra la corrupción y la impunidad.
El Senador morenista indicó que se debe corregir la herencia terrible de los gobiernos anteriores que dejaron a país sumido y a la administración pública con un aparato gigantesco y voraz, consumidor de recursos en medio del flagelo terrible de la corrupción.
“Lo que el Senado hizo esta madrugada fue dar un paso más en ese sentido es revisar, lenta pero firme y sostenidamente esa situación. La gran mayoría de esos fideicomisos se movieron en absoluta y total opacidad, eran recursos sobre los que no se rendían cuentas”, apuntó.