Una de las familias (fueron varias) que más se beneficiaron durante el periodo de gobierno de Silvano Aureoles Conejo, fueron los Bugarini. Jesús Bugarini, patriarca del clan, es un viejo conocido del perredismo desde los años ochenta del siglo pasado, no por su efímero paso como reportero o funcionario de gobierno, sino por su amistad con Cristóbal Arias Solís. La última colaboración de Jesús Bugarini con Cristóbal Arias fue participar en una pandilla llamada, Poder Ciudadano de Michoacán, de la cual también formaron parte, Antonio Soto, Alfonso Solorzano, Julio Santoyo, entre otros.
Son varios los funcionarios de primer nivel que recuerdan a Don Jesús pidiendo ser contratado por el gobierno perredista por la precaria situación en la que se encontraba y “completar las semanas” que le faltaban para lograr su pensión. Así, puedo obtener un espacio como subdirector en la Secretaría de Gobierno de 2017 a 2019 percibiendo poco más de 20 mil pesos mensuales. Luego pasó a la Secretaría de Finanzas y Administración como director de Capacitación, mejorando su salario a más de 37 mil pesos.
Una de sus hijas, Giovanna Bugarini Torres, durante todo el gobierno del “Silvanismo” fue directora de Mercadotecnia de la Secretaría de Turismo, con un sueldo cercano a los 38 mil pesos mensuales.
El pasado martes 3 de mayo en rueda de prensa, Giuliana Bugarini, delegada del Comité Ejecutivo Nacional de Morena en Michoacán, declaró públicamente frente a medios de comunicación: “El pueblo está consciente de quienes estamos trabajando para que existan mejores condiciones en distintos ámbitos en nuestro estado y todo el país. Hoy podemos diferenciar con mucha claridad quienes se oponen a la transformación y quienes quieren conservar un régimen de viejas prácticas”. Le faltó explicar que ella, durante muchos años, formó parte del “régimen” que ahora acusa y fue una opositora a lo que llama “transformación”.
El 1 de octubre de 2015 Silvano Aureoles Conejo rindió protesta ante el Congreso local como Gobernador Constitucional de Michoacán. Giuliana Bugarini fue nombrada secretaria de los Jóvenes con percepciones mensuales por más de 75 mil pesos. Fracasó como funcionaria de primer nivel y pasó a ocupar el cargo de directora general C, en el Instituto de la Juventud (ya no Secretaría) y ganaba 63 mil pesos.
Su “aviaduría” en el Instituto de los Jóvenes duró poco más de dos años, mismos que dedicó a la “grilla” y mutar con discreción del amarillo al guinda. De octubre de 2019 a septiembre de 2021, cambió de hangar y pasó a la Secretaría de Educación como directora de Formación Inicial y Profesionalización Docente. Disminuyó su situación salarial, ganaba poco menos de 40 mil pesos, pero mejoró su condición personal gracias a su cercanía con el entonces titular de la SEE.
En determinado momento los Bugarini: Jesús, Giovanna y Giuliana recibían mensualmente, gracias al “Silvanismo”, entre 140 y 150 mil pesos mensuales, sumando el pago de los tres.
Lo dijo hace unos días la señora Giuliana: “En Michoacán podemos decir hoy con firmeza que, en el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla, se acabaron estos privilegios porque aquí, nunca más vamos a traicionar al pueblo de Michoacán”. Reza un viejo refrán, el que traiciona una vez traiciona siempre.
