Dos cuerpos en avanzado estado de descomposición y con signos de haber sido ejecutados a balazos fueron localizados este miércoles al fondo de un acantilado, ubicado entre las comunidades de Las Pilitas y El Ranchito, en el municipio de Madero. La zona se encuentra bajo tensión luego de que, apenas el lunes pasado, fueron hallados seis hombres asesinados en circunstancias igualmente violentas, según reportes de autoridades ministeriales.
De acuerdo con fuentes cercanas al caso, los cuerpos fueron descubiertos por habitantes de la región, quienes notificaron a la Fiscalía General del Estado (FGE). Al sitio acudieron elementos de dicha institución junto con efectivos de la Guardia Nacional (GN), quienes conformaron un convoy para ingresar al área boscosa donde se registró el hallazgo.
Peritos de la Unidad de Servicios Periciales y Escena del Crimen (USPEC) descendieron aproximadamente 15 metros dentro del barranco, donde localizaron los cadáveres ocultos entre la maleza. Una vez procesada la escena, los cuerpos fueron recuperados y trasladados a la morgue de Morelia para la realización de la necropsia correspondiente. Hasta el momento, ambos permanecen en calidad de no identificados.
La Fiscalía no ha confirmado si los recientes asesinatos están relacionados con los seis homicidios previos, descubiertos el lunes en la misma franja territorial. En aquel caso, tres de las víctimas fueron encontradas calcinadas en la batea de una camioneta incendiada, mientras que las otras presentaban signos de extrema violencia: uno decapitado, otro degollado y uno más con impactos de arma de fuego y huellas de tortura.
Fuentes de seguridad no descartan que las víctimas estén relacionadas con los enfrentamientos entre grupos criminales ocurridos el pasado sábado en los alrededores de El Ranchito, El Capulín, Las Pilitas y Piumo. Estos hechos han encendido las alertas entre la población local, al tratarse de una escalada de violencia en una región donde operan células delictivas vinculadas al crimen organizado.
