El Senado de México pone fin al matrimonio infantil, se castigará hasta con 22 años de cárcel

El Senado de México aprobó la prohibición del matrimonio entre menores de edad y adultos, y el uso de menores de edad como objetos de trueque, delitos que se castigarán hasta con 22 años de cárcel.

Derivado de lo anterior, se anulan los usos y costumbres de comunidades indígenas mediante las cuales se obligaba a niñas a casarse o cohabitar con un adulto, o para regalarlas a cambio de terrenos o animales.

El voto en el Senado fue unánime para avalar la modificación al Código Penal Federal que pone fin al matrimonio forzado infantil, al matrimonio infantil y a la venta de menores de edad por parte de sus progenitores, ejecutada en comunidades indígenas, así como en otras zonas de México por explotación y comercio sexual.

La reforma, que fue enviada al Ejecutivo federal para su entrada en vigor, crea el delito de “cohabitación forzada de personas menores de dieciocho años de edad o de personas que no tienen capacidad para comprender el significado del hecho o de personas que no tienen capacidad para resistirlo”.

Asimismo, define que este delito lo comete “quien obligue, coaccione, induzca, solicite, gestione u oferte a una o varias de estas personas a unirse informal o consuetudinariamente, con o sin su consentimiento, con alguien de su misma condición o con persona mayor de dieciocho años de edad, con el fin de convivir en forma constante y equiparable a la de un matrimonio”.

Al que lo comete, se le impondrá una “pena de ocho a 15 años de prisión y de dos mil a dos mil 500 días de multa”.

Pero además, establece: “La pena prevista en el párrafo anterior se aumentará hasta en una mitad en su mínimo y en su máximo, si la víctima pertenece a algún pueblo o comunidad indígena o afromexicana”; es decir, que la pena mínima de ocho años se convierte en 12 años y la máxima de 15 años, en 22 años y seis meses de prisión.

La senadora presidenta de la Comisión de Justicia, Olga Sánchez Cordero, dijo que los menores de edad que habitan en hogares más pobres, zonas rurales o que pertenecen a grupos indígenas y afrodescendientes, tienen mayor riesgo de ser víctimas de matrimonio forzado.

Además, se refirió al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), cuyos datos señalan que en América Latina “una de cada cuatro mujeres de 20 a 24 años contrajo matrimonio por primera vez o mantenía una unión temprana antes de cumplir los 18 años”.

error: Contenido Protegido