En el estado de Michoacán, la cifra de personas asesinadas continúa en ascenso durante el mes de febrero, con un total de 21 víctimas fatales en tan solo una semana. Entre los más recientes casos, se reporta el espeluznante hallazgo de una persona decapitada en el municipio de Zamora.
La violencia desenfrenada ha dejado una estela de horror en diversas localidades del estado. En las últimas horas, un hombre fue encontrado decapitado en un lote baldío ubicado en la periferia de Zamora, sumando otro caso macabro a la lista de crímenes en la región.
Asimismo, en la zona oriente de la capital michoacana, fue ultimado un joven de tan solo 23 años de edad, evidenciando la crudeza de la violencia que azota a la entidad.
Los datos estadísticos revelan la distribución de los homicidios en distintos municipios: Uruapan registra 4 asesinatos, mientras que Álvaro Obregón, Apatzingán, Morelia y Zamora reportan 3 cada uno. Además, Buenavista, Peribán, Copándaro, Jacona y Gabriel Zamora han sido escenario de un homicidio cada uno, demostrando la extensión geográfica de la violencia en Michoacán.
Ante esta alarmante situación, las autoridades han desplegado una importante fuerza militar en un esfuerzo por contener la ola de violencia. Un contingente de mil 600 militares y miembros de la Guardia Nacional ha sido movilizado en la región, en un intento por restaurar la seguridad y proteger a la población afectada por la violencia desatada.
La escalada de violencia en Michoacán ha generado preocupación y consternación entre la población, que clama por soluciones efectivas y acciones contundentes por parte de las autoridades para frenar esta espiral de violencia que amenaza la paz y la seguridad en la región.
